La secretaria del Bienestar, Silvia Salazar Hernández, exhorta a autoridades municipales a aplicar correctamente los fondos destinados a infraestructura social básica.
En conferencia de prensa Silvia Salazar Hernández, dio a conocer los lineamientos y avances relacionados con el Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS), el cual representa un instrumento fundamental para combatir el rezago social y mejorar las condiciones de vida de la población en situación de pobreza.
Durante una rueda de prensa, explicó que este fondo está compuesto por el Fondo de Infraestructura Social Municipal y de las Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal (FAISMUN) y el Fondo de Infraestructura Social de las Entidades (FISE), y está orientado a obras y acciones en materia de agua potable, drenaje, saneamiento, electrificación, infraestructura básica en salud, vivienda y caminos rurales.
La instrucción de la gobernadora es garantizar el derecho humano por lo que el 30 por ciento de los recursos está en el bosque.
Salazar Hernández puntualizó que el FAIS debe dirigirse exclusivamente a personas en situación de pobreza extrema, en localidades con alto o muy alto grado de rezago social, así como a población indígena y afrodescendiente.
La secretaria informó que, para el ejercicio fiscal 2024, el Gobierno Federal destinó a Morelos más de mil 342 millones de pesos, de los cuales mil 243 millones corresponden al FISM y 99 millones al FISE. Estos recursos son transferidos directamente a los municipios y al gobierno estatal, quienes tienen la responsabilidad de ejecutarlos conforme a los principios de eficiencia, honradez, transparencia y rendición de cuentas.
Durante su presentación, Salazar Hernández subrayó que, de acuerdo con las reglas del FAIS, los ayuntamientos deben priorizar obras que impacten positivamente en los indicadores de carencia social, y recordó que la Secretaría del Bienestar tiene facultades para supervisar el destino y uso de los recursos.
Asimismo, enfatizó la importancia de atender las necesidades reales de la población y no desviar los recursos a obras que no incidan en la reducción del rezago. “No se deben realizar acciones que no estén justificadas por los diagnósticos de pobreza y rezago social; es fundamental que cada peso invertido tenga un impacto directo en la mejora de vida de los morelenses que más lo necesitan”, expresó.
Marcela García / marcela.garcia@diariodemorelos.com