“Los pueblos indígenas de Morelos se encuentran dispersos en cerca de 16 municipios y son alrededor de 35 las comunidades nahuas”, informó el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI).
Estas comunidades se concentran en Hueyapan, municipio de Tetela del Volcán; Tetelcingo, municipio de Cuautla; Santa Catarina, perteneciente a Tepoztlán; Cuentepec, en Temixco y en el municipio indígena de Xoxocotla.
Además, el INPI señala que la geografía donde habitan estos pueblos no es homogénea y se ubican en tres zonas ecológicas distintas: la zona norte, en los valles y las tierras bajas, así como la parte de transición entre las tierras altas y las bajas.
En la primera se caracteriza por tener un clima húmedo frío y aquí se encuentran los pueblos nahuatlatos de Hueyapan, Coajomulco, San Juan Tlacotenco, Ocotepec y San José de los Laureles.
En la región de transición entre las tierras altas y las bajas se localizan las comunidades nahuas de Santa Catarina, San Andrés, Ocotepec, Huazulco, Tetelcingo, Temoac y Amilcingo.
Finalmente, en los valles y las tierras bajas se asientan las comunidades indígenas de Cuentepec, Tetlama, Xoxocotla, Coatetelco y Atlacholoaya.
Permanece en Morelos el habla indígena
El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) destaca que en Morelos hay 38 mil 110 personas mayores de tres años de edad que hablan alguna lengua indígena, de las cuales 24 mil 617 hablan náhuatl, 7 mil 230 mixteco, 2 mil 467 tlapaneco y 722 zapoteco, de acuerdo con cifras del 2020.
Es importante señalar que esta encuesta no menciona que se domina al cien por ciento la lengua que se señala.
Las actividades económicas más importantes que dijo el INPI entre las comunidades indígenas son la agricultura y la ganadería; para la primera se trabaja el hierro forjado en la fabrica de los instrumentos para la roza y corte de caña; en esta rama sobresalen los productores de Jojutla y Cuautla.
En la artesanía ceremonial destacan las comunidades de Tlayacapan, Tepoztlán y Axochiapan. Hueyapan también tiene una gran tradición en el tejido de lana pura para la confección de vestimenta de uso cotidiano, como chincuetes, rebozos, gabanes y fajas.
En Huazulco y Amilcingo se hacen dulces de amaranto, cacahuate y semilla de calabaza.
También, una artesanía local muy importante en cada una de estas comunidades son los arreglos de flores naturales para sus diferentes fiestas religiosas, como son los xochimamastles de Xoxocotla.