Ciudad del Vaticano, 21 de abril de 2025. – Tras el fallecimiento del Papa Francisco este lunes, el mundo católico entra en un periodo de reflexión y transición. Como dicta el protocolo, será el Colegio Cardenalicio, compuesto por 252 cardenales, el encargado de elegir al próximo pontífice mediante votación secreta en el tradicional Cónclave.
De los seis cardenales mexicanos en el Vaticano, dos figuran entre los elegibles, ya que tienen menos de 80 años y pueden votar y ser votados. Se trata de Carlos Aguiar Retes, actual arzobispo primado de México, y Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara.
Carlos Aguiar Retes, nacido en 1950 en Tepic, Nayarit, tiene una trayectoria destacada dentro de la Iglesia. Fue ordenado sacerdote en 1973 y ha ocupado cargos clave en la Conferencia del Episcopado Mexicano y el Consejo Episcopal Latinoamericano. Su formación incluye estudios en seminarios de México y Estados Unidos, y fue creado cardenal en 2016 por el mismo Papa Francisco. Es considerado un perfil cercano a la línea de renovación eclesiástica impulsada por Bergoglio.
Por su parte, Francisco Robles Ortega, también con una sólida trayectoria pastoral, ha sido presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano. Inició su formación en el Seminario Menor de Autlán, continuó en Guadalajara y se perfeccionó en Zamora. Fue designado obispo por Juan Pablo II y posteriormente nombrado cardenal en 2007 por el Papa Benedicto XVI. Desde 2012, encabeza la Arquidiócesis de Guadalajara.
Otros cardenales mexicanos en el Vaticano
Entre los cardenales mexicanos que no cumplen con el requisito de edad para participar en el cónclave, se encuentran:
- Alberto Suárez Inda, arzobispo emérito de Morelia, nacido en 1939 y nombrado cardenal por Francisco en 2015.
- Felipe Arizmendi Esquivel, originario del Estado de México, nacido en 1940, fue creado cardenal en 2020.
- Juan Sandoval Íñiguez, nacido en 1933 en Jalisco, fue arzobispo de Guadalajara y recibió el birrete cardenalicio en 1994.
- Norberto Rivera Carrera, exarzobispo primado de México, nació en 1942 en Durango y fue elevado a cardenal por Juan Pablo II.
La Iglesia se encuentra a la espera del anuncio oficial para el inicio del Cónclave, que marcará una nueva etapa en el Vaticano tras el pontificado de Jorge Mario Bergoglio, quien será recordado por su sencillez, cercanía y firme impulso a una Iglesia más abierta y humana.